"El difícil saber si el Athletic ha merecido pasar. Hemos jugado muchos minutos con diez y ellos han aprovechado tener un jugador más. Estudiamos el partido para contraatacar, pero en esta situación hicimos lo que pudimos. Lo que nos han dejado hacer", señaló el técnico italiano.
"Ha marcado tres goles y nosotros, uno. Honor y gloria a los ganadores", apostilló un Ranieri para quien el árbitro, el francés Clement Turpin, tuvo "personalidad" y estuvo "bien" al mostrar la roja directa a Hummels cuando derribó a Maroan Sannadi siendo el último defensa romanista.
"Ha sido mala suerte, Quizás ha estado un poco lento y debía haber jugado el balón hacia el otro lado. Son errores que no se esperan en un jugador de su categoría, pero que pasan", comentó sobre esa acción del central alemán.
A pesar de la derrota, el entrenador del Roma se mostró "orgulloso" de sus futbolistas porque "estando en una dificultad importante lucharon como leones" y "no se dieron por vencidos".
"No obtuvimos el resultado, paciencia. Esto es deporte. Nos hemos equivocado, pero dentro de tres días tenemos otro partido y la posibilidad de encauzar las cosas", añadió Ranieri, antes de aclarar que decidió sustituir a Paulo Dybala a la hora de juego porque el argentino "estaba muy cansado".