La presencia del atacante de los foxes, siempre comprometido con el Leicester, protagonista en los momentos de gloria de la entidad y fiel en las horas bajas, fue el reclamo principal de un partido que languideció desde su previa, con dos equipos condenados a la Championship.
El público se rindió a su delantero cuando fue sustituido a diez del final por Patson Daka. Vardy ya había cumplido. Había acudido a su cita con el gol al anotar a la media hora tras un balón recibido por James Justin.
También sus compañeros reconocieron sus méritos. Formaron pasillo cuando abandonó el césped en medio de una gran emoción.
El tanto puso por delante al cuadro de Ruud Van Nistelrooy que certificó la victoria que consoló a su afición en el 69, gracias a Kasey McAteer a pase de Wilfried Ndidi.
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Los foxes han maquillado este tramo de su recorrido. Antepenúltimo n la permanencia inalcanzable desde hace semanas, llevan tres partidos sin perder. Dos victorias y un empate. el Ipswich, penúltimo.