La final, intensa pero de escasa brillantez, se decidió a tres minutos para el descanso. Un centro de Pape Sarr desde la banda derecha lo remató en el área pequeña Jhonson y la pelota rebotó en Luke Shaw, a quien en principio se adjudicó el tanto, en dirección a la portería antes de que el internacional gales rozara levemente para acabar marcando el único gol del partido.
La oportunidad más clara del United llegó en el minuto 68 cuando Micky van de Ven, en un despeje acrobático, sacó sobre la línea de gol un cabezazo de Rasmus Hojlund.
