La llegada de Modric al Milan es claramente beneficiosa para ambas partes. Un 'win-win' de manual. El croata llega a un proyecto que ha mostrado interés por incorporarle. Va a tener protagonismo. Y el club italiano salda el déficit de veteranía en un vestuario en plena reconstrucción.
No jugará 'Champions', pero estará en un equipo de primera línea para poder llegar en forma al Mundial 2026, que es su verdadero objetivo.
También está el factor Boban de por medio. La ilusión de jugar en el equipo de su gran ídolo. Ya en su día, Modric hizo llorar a su compatriota y ahora amigo. Era 2018 y le acababan de reconocer como premio 'The Best', en el mismo año que ganó el Balón de Oro. Y en esa gala dedicó el premio al futbolista que fue su inspiración y con el que, desde ahora, compartirá también equipo de por vida.
"Me gustaría hacer mención a mi ídolo, el capitán de Croacia en el 98, mi gran inspiración, Boban, y a aquel equipo de Croacia que nos ha servido de ejemplo. Esperamos servir ahora nosotros de inspiración para la siguiente generación. Todos podemos ser el mejor. Con trabajo duro, fe y tesón, todos los sueños pueden convertirse en realidad", dijo Modric en el escenario.
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Boban, el primer croata del Milan, ganador de 7 títulos con el club 'rossonero' (3 'Scudetti' y 4 Supercopas de Italia), apenas pudo contener las lágrimas. Ahora, Modric, a sus casi 40 años, será el duodécimo de la lista.
Llega el excapitán del Real Madrid, eso sí, a un Milan diferente al de aquellos años 80. Con nuevo entrenador, Massimiliano Allegri, y en construcción tras una temporada desastrosa en la que se quedó fuera de competiciones europeas, el proyecto solo disputará Serie A y Copa Italia, lo que le permitirá tener protagonismo para su objetivo, legar en forma al Mundial de selecciones con Croacia.
Siempre, claro, con el anhelo de volver a Liga de Campeones. Algo que el para el Milan, por historia, se considera un requisito mínimo. Y uno de los motivos por los que el Milan apuesta por Modric es la falta de autoridad, experiencia y liderazgo de un futbolista dentro del vestuario que permita enderezar el rumbo en ese sentido, hacia ese objetivo de 'Champions'.
"Hablé con él en persona, vi a un hombre con muchas ganas de ser competitivo. Su llegada es fundamental para un grupo que necesita jugadores así, que necesita liderazgo", comentó el albanés Igli Tare, director deportivo del club, a finales de junio, cuando el fichaje estaba prácticamente cerrado.
"La primera pregunta que me hizo Luka fue: '¿seremos un equipo hecho para ganar el campeonato?'. Ha ganado seis Ligas de Campeones y quiere ser un jugador estrella desde el principio, es importante por lo que va a transmitir como mentalidad, liderazgo y profesionalidad", añadió.
El centrocampista, ganador de 6 'Champions' en las 13 temporadas que militó en el Real Madrid, se despidió de la casa blanca en la última jornada de liga, con un homenaje en el Santiago Bernabéu que finalizó con ovación a la leyenda croata.
Sin embargo, su último partido con el Real Madrid, con la camiseta del equipo en el que se convirtió en leyenda, fue ante el PSG, en una despedida agridulce en las semifinales del Mundial de Clubes (4-0).
Modric, además de las 6 'Champions' y el Balón de Oro, acumula un extenso palmarés (34 títulos en total) que incluye 3 ligas, 2 copas y una supercopa croatas con el Dinamo Zagreb; y 5 Mundiales de clubes, 4 ligas, 5 supercopas, 2 copas y una Intercontinental con el Real Madrid.