"Ahora que ha empezado ya la competición ha sido una muestra. Para nosotros es fundamental porque en cualquier jugada te puede fabricar una ocasión de gol y el contrario se siente amenazado permanentemente, que es de lo que se trata", destacó el técnico del conjunto bilbaíno sobre el extremo internacional.
Valverde señaló que el correspondiente a la Primera división del fútbol español fue un encuentro "con bastante ritmo" que "no parecía que fuera el primero" de la temporada".
"En el primer tiempo dominamos de manera clara y en el segundo ellos salieron mejor y estuvimos más dubitativos. Se han metido en el partido con el golazo de Lukebakio y no estábamos frescos. Al final hemos podido ganar, pero todos los jugadores han acabado fundidos", aseguró.
Añadió el técnico que fue "la obligación de jugar en casa" lo que les empujó a "dar un paso adelante" y buscar el tercer gol a pesar de la "falta de frescura para tirar la presión más alta" de la que adolecieron en la segunda mitad.
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"No le hemos perdido la cara al partido y pudimos hacer el tercero", resaltó antes de admitir la importancia de los tres puntos "para ir colocándote" en la clasificación y olvidar "una pretemporada dura y sin buenos resultados".
"Y también tenía ganas de ganar con el Athletic el primer partido de liga porque hacía mucho tiempo que no lo hacía", admitió Valverde, que no sacaba los tres puntos en la jornada inaugural como entrenador del equipo rojiblanco desde 2013 en Valladolid.