Pedri, con un gran disparo lejano, levantaba de la lona a su equipo, Ferran Torres empataba y, cuando el duelo se apagaba, la mala fortuna se alió con Unai Elgezabal. Apareció, como siempre, Lamine Yamal y su centro peligroso encontró la colaboración más inesperada. En el intento de despejar el peligro, el jugador del Levante tiró por tierra todo el esfuerzo mandando dentro de su portería el balón. El Barça mantiene el pleno de triunfos lejos de su estadio.
La suplencia de Vinícius y su reacción
Con tan solo dos partidos en la temporada, la decisión de Xabi Alonso de sentar en el banquillo a Vinícius Jr. tuvo cierto aroma a toque de atención. El brasileño no lo tomó mal, sonriente en la suplencia, se reivindicó cerrando su mala racha sin gol cuando saltó al césped en el segundo acta, siendo importante en el triunfo del Real Madrid en el Carlos Tartiere.
Regaló el segundo gol del partido a Kyliam Mbappé, castigando los espacios que encontró el Real Madrid cuando el Oviedo se lanzó por el empate, y marcó el tercero. Ya había dejado un gesto a la grada en el gol de su compañero y Mbappé le tapó la boca para que nadie leyera sus labios. Un sector de la afición rival recibió a 'Vini' coreando "tonto, tonto" y el brasileño respondió.
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El desquite de Rafa Mir
Las dudas marcan el inicio de temporada del nuevo Atlético de Madrid. Muchos cambios y poco tiempo para trabajarlo. Malas sensaciones en el estreno, remontado en el RCDE Stadium, confirmadas en la puesta de largo del Metropolitano. Un recién ascendido como el Elche se llevó un punto sin sufrimiento, con el tanto de un futbolista que desea enterrar una etapa dura marcada por asuntos extradeportivos que afectaron a su carrera.
Desea empezar de cero Rafa Mir en el Elche y enterrar la pasada temporada. En el Metropolitano comenzó a demostrar su valor poniendo la guinda a un contragolpe letal de un equipo con la identidad de Éder Sarabia. La visión de Germán Valera con un desplazamiento en largo que cogió desprotegido al Atlético de Madrid tras un saque de esquina a su favor. El pase preciso de Álvaro Rodríguez y la definición del punta. El puño al aire y la sonrisa de vuelta de un jugador que tocó fondo y renace.
El recital del Villarreal; el sufrimiento de Míchel
Un equipo hecho que ilusiona a su afición. Líder de LaLiga EA Sports un Villarreal imparable en su arranque. La imagen de Marcelino García Toral, exultante ante el recital de sus jugadores en La Cerámica, en contraste con la profunda decepción de Míchel Sánchez. Ya perdía 4-0 en el descanso por hidratación pasada la media hora de partido y no dijo nada a sus jugadores salvo un cambio de sistema.
Las habituales charlas tácticas con retoques y motivacionales de Míchel desaparecieron. Avergonzado de lo que veía. "Estamos esperando a que se cierre el mercado para empezar a jugar. No somos un equipo", afirmó molesto con la falta de actitud de sus jugadores que no competieron. Se llevaron una 'manita', goles de todos los colores del Villarreal con Tajon Buchanan desatado, autor de un triplete que hace soñar a una ciudad enamorada de su equipo el año de regreso a la Liga de Campeones.
Gayá lanzando el brazalete de capitán del Valencia al césped
Lo tenía todo a favor José Luis Gayá para cortar un ataque rápido de Osasuna en El Sadar. El saque directo de su portero buscó un contragolpe que sorprendiese al Valencia con su zaga descolocada. Evitó cualquier problema su capitán, tan sobrado en la acción que tardó en decidir el momento en el que impactar con el balón y cuando lo fue a hacer, tras desperdiciar la ventaja que tenía, un mal bote provocó la imprecisión, el momento de duda y la presión de Víctor Muñoz hizo el resto.
La rabia y la frustración que sintió Gayá al derribar al jugador de Osasuna, ver al colegiado mostrarle la tarjeta roja directa y sentir que fallaba a su equipo a los 22 minutos del partido, le hizo protagonizar una acción de la que se arrepintió en segundos. Se quitó el brazalete de capitán y lo lanzó al césped con enfado. A la conclusión del partido, tras la primera derrota del Valencia, pidió perdón.
