Mancini, de 60 años, vuelve a los banquillos después de salir del banquillo del conjunto nacional saudí en octubre del pasado año para tratar encerezar el rumbo del club más laureado del fútbol catarí, que en la Superliga es ahora mismo tan solo sexto tras nueve jornadas, a ocho puntos del líder Al Gharafa.
El italiano ocupa el puesto que estaba vacante desde la salida del español Félix Sánchez por esos malos resultados.
