Libertad orilló el papelón en la Copa Libertadores. El Gumarelo clasificó a octavos de final, pero culminó el partido goleado por un equipo eliminado, pidiendo la hora y preguntando qué pasaba en Argentina. La derrota 4-2 contra el DIM y la victoria 3-0 de Boca Juniors sobre Caracas dejaron al Repollero en el segundo lugar del Grupo H. “Todo el plantel está apenado, triste, yo como cabeza del grupo también por el resultado”, arrancó Gustavo Morínigo en conferencia.
“Nosotros vinimos para otra cosa, para ganar. Tenemos un plantel muy rico y tenemos que ir encontrando una sintonía de juego. El análisis seguramente lo haremos entre hoy (jueves) y mañana (viernes), seguramente vamos a charlar. Es un golpe que quizás nos sirva para mejorar”, continuó. “Tuvimos errores tácticos y por lo menos tenemos una oportunidad más para lavarnos la cara. Creo que la idea en sí se rompió con el segundo gol, a partir de ahí que complicó un poco”, añadió.
“No hemos hecho un buen partido, el DIM vino a jugar relajado y golpeó mucho al equipo y se vinieron los goles de seguido. El fútbol tiene estas cosas, a veces es justo e injusto. No tuvimos un buen partido pero lo bueno es que tenemos otra oportunidad”, culminó Morínigo, quien desde el mediodía estará atento al sorteo de los octavos de final para conocer al adversario del conjunto de Tuyucuá (medirá a los primeros) en la serie de los 16 mejores del certamen continental.