Si la nadadora escandinava ya demostró con el tercer puesto que firmó el martes en la final de los 50 libre que su recuperación marcha por buen camino, este miércoles Sjostrom dejó claro con su nuevo podio en el hectómetro que está en disposición de acudir a los Juegos Olímpicos de Tokio.
Una cita en la que como reconoció la propia Sjostrom será complicado que pueda pelear por las medallas.
“Parece que queda una eternidad hasta que pueda volver a nadar en tiempos de récord del mundo”, señaló Sjostrom en declaraciones a la Federación Sueca de Natación.
“Me queda un largo camino, pero al menos estoy nadando, estoy compitiendo y eso es divertido”, añadió la plusmarquista mundial de los 50 y 100 metros libre y mariposa.
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De hecho, Sarah Sjostrom, que firmó un tiempo de 54.84 en la final de los 100 libre, concluyó a más de un segundo de la ganadora de la prueba, la danesa Pernille Blume que se impuso con una marca de 53.80 segundos.
Un registro que la sueca intentará mejorar dentro de tres semanas en el Trofeo Sette Colli que se disputará del 25 al 27 de junio en Roma.
Competición en la que a diferencia de lo ocurrido en Canet-en-Roussillon Sjostrom podría participar en los 100 mariposa, la prueba de la que es la vigente campeona olímpica, y a la que renunció en esta ocasión ante las dificultades que todavía tiene a causa de su lesión para rendir el máximo nivel en las pruebas de mariposa.
