Lazaros y Leontios Stefanidis, padre e hijo unidos por un sueño común

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David RamiroTokio, 3 sep (EFE).- Cuando Lazaros Stefanidis decidió crear un club de atletismo en la ciudad griega de Tesalónica lo hizo para ofrecer a las personas con discapacidad oportunidades de practicar deporte y convertirse, algún día, en deportistas paralímpicos.

Seguramente lo que no se imaginó Lazaros, con discapacidad física, fue que su hijo, Leontios, con discapacidad intelectual, se convertiría en una de las estrellas del club y que ambos llegarían a acudir juntos a los Juegos Paralímpicos de Tokio.

"Solo estar en unos Juegos juntos es la mejor historia que se podría escribir en el deporte. Ya me siento un ganador. Es una sensación única y estamos todos muy felices", declara Lazaros, que, a sus 64 años, es uno de los deportistas más veteranos que acuden a la cita nipona, en la que la edad, a veces, no es un hándicap, como le ha ocurrido al nadador español Sebastián Rodríguez, presente con esos mismos años en tres finales.

Lazaros, el padre, ya sabe lo que es competir al más alto nivel. Participó en los Mundiales de Assen (Holanda) en 2006, en lanzamiento de disco, y en el de Dubai (Emiratos Árabes) en 2019, en jabalina y peso, y también en el último Europeo de Polonia este 2021, en el que coincidió con su hijo Leontios, que rozó el podio con un quinto puesto.

"Estoy orgulloso de competir con mi padre en los Juegos Paralímpicos y de que hayamos hecho este viaje juntos. Me siento afortunado", confiesa.

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Lazaros siempre ha sido lanzador. De peso, disco y jabalina. Esa misma preferencia tiene su hijo, de 22 años, que ha aprendido de su mentor quedándose con el lanzamiento de peso.

"Mi hijo ha venido con nosotros a competiciones desde que era un bebé. Mis dos hijos crecieron con el deporte y en concreto con el atletismo y han aprendido a amarlo. En el caso de Leontios ha entrenado desde los doce años en todas las disciplinas de lanzamiento, pero eligió el peso y espero que se mantenga saludable y que sea un atleta paralímpico muy exitoso", declara orgulloso Lazaros.

Después del Europeo de Polonia, estos Juegos Paralímpicos son la competición más importante que comparten juntos con el peso como elemento central. "Elegí el atletismo por mi padre aunque el lanzamiento de peso no fue por él. Es muy dinámico, necesitas mucha técnica, paciencia y persistencia y a mí me gusta mucho".

Aparte de lograr un buen resultado, el principal objetivo en Polonia era representar a Grecia familiarmente en Tokio.

"Terminé cuarto en el Europeo y mi hijo terminó quinto. No hay mejor sensación que competir juntos. He visto todo su recorrido desarrollándose como atleta así que me siento muy especial. Y en estos Juegos estamos viendo cosas extraordinarias aparte del tiempo compartido juntos en la villa", confiesa Lazaros.

Lecciones de deporte pero también lecciones de la vida aprendidas en el salón de casa. "Mi padre me ha enseñado a no darme nunca por vencido porque las fortalezas humanas pueden alcanzar barreras desconocidas y puedes alcanzar puntos que nunca habías imaginado, así que siempre debes intentarlo y serás recompensado con buenos resultados", subraya Leontios.

Lazaros y Leontios no han sido los únicos representantes del club de atletismo AS Lazaros Stefanidis O Makedonas en los Juegos Paralímpicos. También han estado Athanasios Konstantinidis, Athanasios Prodromou y Kostantinos Tzounis.

"Creo que somos el club deportivo con más atletas en los Paralímpicos y todos hemos tenido buenas expectativas en estos Juegos", confiesa Lazaros, orgulloso fundador del club.

Padre e hijo, 42 años de diferencia y un sueño cumplido en el mismo escenario, el Estadio Olímpico de Tokio, un lugar que siempre tendrá un sitio especial en el corazón de la familia Stefanidis.