Una multitud de 40.760 aficionados estaban listos para celebrar la corona de la primera división de San Francisco desde 2012, pero los Padres arruinaron la fiesta.
La racha ganadora de siete juegos de los Gigantes terminó, pero aún tenían la oportunidad de ganar la división horas después si los Dodgers de Los Ángeles pierden ante los Cerveceros de Milwaukee.
Si los Dodgers ganan, mantendría el número mágico de los Giants en uno, y forzaría la carrera hasta el último día de la temporada regular. San Francisco comenzó el sábado con una ventaja de 2,0 juegos sobre Los Ángeles.
Sobre la lomita el triunfo se lo acreditó el relevo Tim Hill (6-6) en un episodio.
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Los Gigantes perdieron con el relevo venezolano Kevin Castro (1-1) en dos tercios de entrada.