Nadal, cuarto cabeza de serie del torneo, venció a Norrie, sexto preclasificado, en una hora con 54 minutos y 39 segundos. Fue el cuarto triunfo del español ante el británico en cuatro enfrentamientos de por vida.
En la final, Norrie se mostró como el rival más complicado que Nadal tuvo a lo largo del torneo, y por ello se enfrascaron en un primer set en el que prácticamente no hubo errores, apenas una doble falta del británico que jugó un tenis más agresivo que en rondas anteriores.
Por su lado, el español empezó boleando en corto y con el paso de los puntos tuvo servicios y tiros cada vez más potentes y colocados, y además aprovechó la única oportunidad de quiebre que se presentó en el set para ganarlo en 51 minutos con 17 segundos.
En el arranque de la segunda manga, Nadal se mantuvo concentrado y preciso en la devolución y anticipó que buscaría la victoria en sets corridos al quebrarle el servicio a su rival en la primera oportunidad para ponerse en ventaja 1-0.
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La molestia y la frustración fueron evidentes en Norrie, quien estrelló su raqueta contra la pista al verse abajo en la pizarra, pero el británico se centró y puso en aprietos a “la Fiera de Manacor”. “No ha sido mi mejor partido del torneo, pero mirando la parte positiva fue contra uno de los jugadores más en forma del circuito”, dijo Nadal (AFP).