Schmidt, de 21 años y una de las grandes esperanzas del judo brasileño para los Juegos de París 2024, se alzó con el triunfo tras y emocionante triunfo sobre el turco Vedat Albayrak, que se adelantó con un "waza-ari".
Pero el brasileño, que ya se colgó el bronce en los Mundiales júnior disputados en el año 2019 en Marrakech, dio la vuelta al combate y se impuso con un "ippon" a falta de cuarenta segundos para el final.
Un escalón más abajo en el podio concluyó su actuación en la ciudad turca el también brasileño William Lima, que logró la medalla de plata en la categoría de hasta 66 kilos.
William, de 22 años, tan sólo cedió en Antalya ante el moldavo Denis Vieru, número uno de la clasificación mundial, que se impuso en la final al brasileño en la "técnica de oro".
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Un tiempo extra en el que William Lima, campeón del mundo júnior en el año 2019, sumó su tercer "shido" -penalización- que otorgó el triunfo definitivamente al judoca moldavo.
Dos medallas a las que sumar los tres bronces que Rafael Macedo, en la categoría de -90 kilos, Jessica Lima, en la de -57, y María Portela, en la -70 kilos, lograron para el equipo brasileño en la cita otomana.
Un Grand Slam en el que también brillaron los cubanos Iván Felipe Silva, que se colgó la medalla de oro en la categoría de hasta 90 kilos, y Andy Granda, que logró el oro en +100 kilos.
Silva, que este año ya había sido bronce en el Grand Slam de Tel Aviv, se impuso en la final por "ippon" al georgiano Luka Maisuradze en un combate que se resolvió a favor del caribeño en la "técnica de oro".
Igualmente Andy Granda tuvo que esperar al "punto de oro" para doblegar por "waza-ari" al húngaro Richard Sipocz en la lucha por la medalla de bronce en la categoría de más de 100 kilos.