"Es como un sueño. No me lo creo todavía. Pensaba en acabar entre los diez o los cinco primeros, pero no esperaba esto", comentó, todavía sorprendido un Foss que confesó que le resultará "muy especial vestir el maillot arcoíris". "Lo honraré lo mejor que pueda”, avanzó.
El compañero de Primoz Roglic y Jonas Vingegaard en el Jumbo Visma sabía que llegaba a Australia en buena forma, pero sin pensar en el oro: "Las piernas estaban bien. Sabía que venía de Canadá en buena forma, pero no esperaba esto. No me vi ganador hasta que se acabó la carrera. Le di todo y no me pudo ir mejor. Estoy muy satisfecho, es increíble",
Ya sobre el desarrollo de la prueba, explicó, que "apenas había tiempo para relajarse o reducir la velocidad", que el recorrido era un continuo "sube y baja muy técnico" en el que "había que apretar en las curvas y en los tramos más empinados" y luego "descansar un poco en las zonas cuesta abajo".
