Nueve sudamericanas unen sus caminos para buscar un ascenso a la élite

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Rafael Peña Ceuta, 6 oct (EFE).- Seis nacionalidades distintas, nueve jugadoras sudamericanas y hasta cinco de ellas internacionales con sus respectivos países. Ésta es la apuesta de un club femenino de fútbol sala de Ceuta (CD Camoens) a la que es difícil encontrar precedentes en el ámbito español de este deporte por la elevada presencia de deportistas de otro continente.

El hecho poco frecuente se encuentra en el grupo III de la Segunda División Nacional de fútbol sala, la segunda categoría española. El equipo ceutí ha decidido apostar por entrar en la élite y, para ello, ha configurado una plantilla con once incorporaciones, donde destacan las representantes de Sudamérica.

Las brasileñas Jacke (Sao Paulo, 32 años), Andrea (Manaus-Amazonas, 30), Myrielen (Sao Paulo, 29) y Rapha Martins (Curitiba, 30); las argentinas Emilia Bertoni (Florida, 20) y Ale Giménez (Buenos Aires, 23), la uruguaya Maura (Montevideo, 28), la paraguaya Diana (Santa Rosa Misiones, 32); y la guatemalteca Tammy (Ciudad de Guatemala, 35) son las que conforman la nómina de extranjeras del CD Camoens.

De ellas, sólo Maura y Tammy repiten de la pasada temporada, ya que el resto se ha unido este año a un plantel que buscará el salto a la Primera División con el "arma sudamericana" como mejor baza.

PRESIDENTE Y ENTRENADOR

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El presidente del CD Camoens es Pablo Pereña Castillejo, de 29 años, técnico de radiología, que ha visto conveniente hacer esta apuesta justo en el momento en el que el club afronta su cuarta temporada consecutiva en la Segunda División.

"Tenemos que aspirar a mirar los puestos altos de la tabla porque el objetivo es jugar los play-off de ascenso. Ha sido bastante costoso y laborioso traer este elenco de jugadoras porque hay muchos procedimientos administrativos y, además, la Ley de Extranjería cambió en el mes de marzo con la apertura de la frontera y esto ha provocado que los trámites se hayan alargado más", ha dicho a EFE el presidente, quien estrenó su cargo el pasado mes de junio.

Pablo Pereña está "muy contento" con la acogida de las nuevas. "Se están adaptando muy bien, les ha gustado la ciudad y el ambiente, además del clima y las comidas porque algunas vienen de pasar frío en Rusia o Zaragoza, y ellas lo agradecen".

"Sabemos que la presión será muy alta pero trabajaremos con humildad y ganas para que lleguen los resultados. Es un reflejo para que las más pequeñas quieran estar en el primer equipo del club", ha puntualizado.

Por su parte, el entrenador, Rachid Ahmed Alí, de 53 años, cumple su tercera temporada en el fútbol sala femenino con una trayectoria de veintidós años en los banquillos. "Son culturas y formas de pensar distintas pero en el campo se hace más llevadero porque no se habla tanto, por lo que es más fácil, de ahí que el mayor problema es la comodidad que puedan encontrar en la ciudad".

Rachid Ahmed dice: "Siempre he deseado tener una plantilla así porque son muy profesionales y lo que más me llama la atención es la entrega, su puntualidad y su seriedad, además de que preguntan cuando tienen alguna duda, lo cual es importante porque los españoles somos más reservados y nos callamos".

El entrenador ceutí ha valorado que el proyecto "es para estar lo más alto posible y eso me agrada y en esta categoría nos tenemos que exigir todos y es un placer entrenarlas. No me siento presionado y esperamos estar a la altura de las exigencias".

La capitana del conjunto, Yasmina Mohamed -de 24 años, doce años en el club- ha destacado a EFE que "se nota la experiencia, vienen de equipos con mayor nivel y es un orgullo poder jugar con ellas, muchas son internacionales y este año queremos disputar los play-off de ascenso, además de que me he entendido muy bien en la pista y también fuera de ella".

BRASIL, URUGUAY Y GUATEMALA

En el plano deportivo, la uruguaya y pivot Maura Scaletti cumple su tercera temporada en Ceuta, donde llegó en marzo del 2020. "Todo es nuevo, un proyecto ambicioso, habrá mucha competencia pero contenta porque hemos ido subiendo un escalón y este año es un desafío con todas las caras nuevas".

La uruguaya ha resaltado: "Tenemos que adaptarnos entre todas y que todo vaya sobre ruedas para mantener un nivel. Tuve una demora por los trámites de papeles pero me vino un poco bien para apurar con la familia" (risas).

Por su parte, la guatemalteca y ala-cierre Tammy Déleon ya lleva seis años en España al pasar por el Universidad Valladolid (17-18), Intersala (18-20), Universidad Salamanca (20-21) y desde hace dos en el Camoens.

"Es de agradecer el esfuerzo del club porque buscan hacer las cosas más profesionales y eso se valora mucho. Más de la mitad del equipo es bueno y la mayoría extranjeras, me alegro por las latinas y pienso que pinta para hacer una bonita temporada si nos lo proponemos, trabajamos y tenemos el objetivo claro de estar en el play-off", ha comentado a EFE.

Tammy echa de menos a su entorno: "Tengo tres hermanos varones, tres sobrinos, mis amistades y la cultura en sí porque hay momentos en los que añoro mi país. Es la primera vez que estoy en un vestuario con tantas nacionalidades porque donde jugaba era yo la única extranjera".

Finalmente, la brasileña y ala-pívot Raphaella Martins llegó a España en la 18-19 y ha militado en el Sala Zaragoza desde noviembre de 2016, alcanzando 151 goles en 132 partidos. "Estoy muy adaptada al país, al principio fue muy difícil, pero añoro a mi familia, mis amigos y mi comida pero mi sueño es estar jugando fuera y tengo que dejarlo de lado".

Sobre el nuevo vestuario ha dicho: "En Zaragoza teníamos el mismo objetivo pero sólo estaba yo de extranjera pero este año me estoy adaptando muy bien. Aquí estoy de maravilla, el clima es muy bueno, la gente superamable y espero aportar mi experiencia en Primera, goles y todo lo que pueda dentro y fuera de la pista", ha añadido la jugadora, que deja en Brasil a su familia, entre ellas un hermano de 28 años.

Seis nacionalidades -incluyendo la española-, nueve fichajes -dos de ellas españolas- y un sueño: estar en la élite del fútbol sala femenino español. Así es la apuesta del CD Camoens de Ceuta, un equipo que ya ha hecho historia por reunir un vestuario tan variopinto pero lleno de ilusión.