Un pleno de victorias que no pudo emular Dinamarca, que busca convertirse en el primer equipo en encadenar tres títulos universales consecutivos, tras empatar 32-32 con Croacia en su primer compromiso serio en el torneo.
Tras golear con facilidad en la primera fase a las débiles Bélgica, Baréin y Túnez el conjunto nórdico se enfrentó a su primer rival de envergadura, una Croacia, que tampoco había transmitido las sensaciones, tras caer en la primera jornada del Mundial por un claro 31-22 ante Egipto en la primera jornada del torneo.
Pero este jueves Croacia, liderada por el pivote Marin Sipic, autor de nueve tantos, sí que fue el competitivo equipo de costumbre y cuestionó el cartel de máximo favorito del equipo danés, que no supo aprovechar un último balón para alzarse con la victoria.
Un inesperado tropiezo que permitió a la selección de Egipto, que dirige el español Roberto García Parrondo, auparse a la primera plaza del grupo IV, que se disputa en la ciudad sueca de Malmoe, con una victoria sobre Bélgica que fue más plácida que lo que reflejó el 33-28 final.
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Tal como reflejaron los ocho goles de ventaja (30-22) con los que el campeón africano, en el que volvió a destacar el lateral Mohsen Mahmoud, autor de siete dianas, alcanzó los últimos diez minutos de juego.
Un tiempo en el que los de Roberto Garcia Parrondo, semifinalistas en los pasado Juegos Olímpicos de Tokio, se dejaron llevar por completo, sin que peligrase nunca su victoria, pese a la reacción final del conjunto belga.
Tras egipcios y daneses se situó en la tercera plaza del grupo y con opciones todavía de acceder a los cuartos de final, al igual que la selección de Croacia, el equipo de Baréin, que derrotó por 27-32 a Estados Unidos, en un choque en el que brilló el central Husain Alsayyad, autor de once tantos.
Una carrera por los cuartos de final en la que nadie parece capaz de alcanzar en el grupo III, con sede en la ciudad polaca de Katowice, a las selecciones de Alemania y de Noruega.
Y eso que el conjunto noruego, plata en los Mundiales de 2017 y 2019, sufrió lo indecible para derrotar por 31-28 a Serbia, en un choque en el que los balcánicos, que dirige el español Toni Gerona, soñaron con la sorpresa tras situarse con una ventaja de dos goles (20-22) a los once minutos de la segunda mitad.
Un sueño con el que se encargo de acabar Noruega, en la que Sander Sagosen cerró la contienda con cinco tantos, con un contundente parcial de 9-2 en los siguientes trece minutos, que dejó sentenciada (29-24) la contienda.
Mucho más plácida fue la jornada para Alemania, que sólo conoce la victoria en el torneo, tras doblegar por un contundente 39-19 a Argentina, en un choque que los del islandés Alfred Gislason dejaron sentenciado con los trece goles de ventaja (24-11) que contaban al llegar el descanso.
Ni el buen hacer del central Pedro Martínez Camí, autor de cinco tantos, pudo impedir la goleada del conjunto germano, al que le bastó con la generosidad de Juri Knorr que no se aburrió de asistir una y otra vez a los extremos Lukas Mertens y Patrick Groetzki, así como al pivote Johannes Golla, que cerraron el choque sin fallo en el lanzamiento.
Una derrota que dejó a los "Gladiadores" sin ninguna opción de acceder a los cuartos de final, todo lo contrario que la trepidante selección de los Países Bajos, que sigue muy viva en la pelea tras vencer por 30-32 al Catar del español Valero Rivera.
Encuentro que no se decantó a favor de los neerlandeses hasta un minuto y medio para el final cuando con el marcador 29-30 el pivote Samir Benghamen culminó un contraataque que el mismo se había encargado de provocar con un robó de balón para situar a los Países Bajos con una renta de dos goles (29-31) que Catar ya no pudo enjugar.