Cabaco lamentó que “la suerte no acompañó al final” a su equipo en la pasada jornada, ya que el Granada ganó al Mirandés (1-3), pero no pudo lograr el ascenso directo de forma matemática al darse los resultados necesarios en otros partidos.
“Nosotros teníamos un partido que había que ganar y se ganó. No pudimos ascender, pero estoy feliz por el equipo y feliz por la familia que tenemos en este vestuario”, agregó el uruguayo en declaraciones a los medios del club.
“Queda un paso que afrontamos con la misma ilusión de toda la temporada”, destacó Cabaco, con la mente ya puesta en el partido del sábado ante el Leganés, que daría el ascenso al Granada en caso de empate o victoria.
El zaguero dejó claro que el choque ante el conjunto pepinero “es literalmente una final” y resaltó que el Nuevo Los Cármenes “está siendo un fortín” esta temporada: "se siente mucho cuando los aficionados están con nosotros y los esperamos a todos el sábado”, afirmó.
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