La catalana, que ya se ha colgado dos medallas en este Mundial de Fukuoka, el bronce en solo técnico y el dúo técnico con Alisa Ozhogina, se tiró por quinta vez a la piscina para completar un ejercicio diferente, con la idea de "salir de su zona de confort", según Mayu Fujiki, su entrenadora.
Su coreografía, inspirada en un tema de Beyoncé, admite muchos matices, pero también conlleva muchos riesgos, que le llevaron hasta esa séptima plaza con tres penalizaciones ('base marks') en elementos coreográficos híbridos.
La mejor nota de la sesión fue para Inui, la campeona mundial que defiende título, con 253,1853 muy alejada de Tió (174,0208), aunque con el nuevo sistema de puntuación, este dato poco tiene de importancia, más allá de la clasificación para la final.
También se han clasificado para la final la británica Kate Shortman, la griega Evangelia Platanioti, la coreana Yoonseu Hur, la sanmarinense Jasmine Verbena, la austriaca Vasiliki Alexandri, la canadiense Audrey Lamothe, la croata Matea Butorac, la turca Ece Ungor, la nadadora de Aruba Kyra Hoevertsz y la francesa Laelys Alavez.
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La final se disputa este miércoles a las 12:30 CET.