También ha dejado meridiano Ancares, una ascensión terrible en los cinco últimos km siempre por encima del 10 por ciento de desnivel, que un año más la victoria en la gran vuelta española por etapas no está destinada a un corredor español.
Mas era la gran baza y pinchó; Landa llegó por delante, pero está aún lejos; y Carlos Rodríguez cedió mucho en las primeras etapas como para ser aún alternativa.
Todas esas certezas, junto a la de que el ecuatoriano Richard Carapaz puede decir mucho aún -bueno pero también malo, como hoy-, han ido apareciendo según iba ascendiéndose un puerto en el que ganó, consecuencia de una escapada, el canadiense Michael Woods. Especialista en este tipo de jornadas.
Movistar marca el ritmo
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Con la escapada por delante y una caída de los UAE Brandon McNulty y Jay Vine que la desorganizó por completo, los favoritos arrancaron la pared de Ancares a ritmo de Movistar. A la velocidad que marcaba Nairo Quintana en su acción más relevante de lo que llevamos de carrera.
Detrás de la leyenda de Boyacá parecía esperar su momento Einer Rubio, pero su turno no llegó. En parte por falta de fuerzas y en parte porque Decatlhon apareció para controlar las cosas y proteger al líder.
Red Bull avanza el ataque de Roglic
Aunque probablemente la razón principal de la desaparición del Movistar de las primeras posiciones fue la entrada en escena del Red Bull-Bora, que aumentó el ritmo y desbrozó un pelotón que destrozó Roglic unos metros más adelante con una marcha que al principio siguió Mas pero ya no O'Connor.
Mikel Landa cedió también al principio pero logró engancharse como pudo y Richard Carapaz apuntaba a otro damnificado del día mientras se esperaba un mano a mano Roglic-Mas e incluso un intento del español, que había dejado grandes sensaciones días anteriores camino de Granada y Baiona.
O'Connor pierde tiempo pero no la moral
El líder iba perdiendo cada vez más tiempo y opciones. Pero no fe, ya que su objetivo está claro: "aguantar el rojo cuanto pueda". "Si es hasta el final, mejor", dijo en meta poco afectado por su mal día. Que reconoció si ambages.
Revienta Mas, aguanta Landa y revive Carapaz
Pero distó mucho de ser así. Roglic siguió apretando y el que cedió, sorprendentemente, fue Mas, que empezó no solo a ver que se le alejaba el esloveno sino como le iban pasando rivales, "vacío" como se encontraba. Mientras, Landa encontró acomodo a rueda de Kasper Asgreen y tiró hacia delante con la referencia de Roglic. Carapaz llegó por detrás recogiendo 'cadáveres'. El último el de Mas.
Woods gana y Roglic da un paso de gigante para su cuarta Vuelta
Casi once minutos después de que Woods levantase los brazos celebrando uno de esos triunfos de prestigio que consigue regularemente (Puy de Dome en el Tour y Monte Oiz y Valdegobia en anteriores Vueltas), Roglic llega dando tremendos zapatazos en meta y por detrás una ristra de candidatos. Que no favoritos.
Ya que, aún sin hacerse con él, el rojo parece destinado al esloveno. Algo que explicaron con claridad cinco momentos claves de la vertical subida a Ancares.