“También tengo que decir que si no hubiera visto posibilidades de ganar no hubiera saltado ni siquiera a la pista. Al principio le he incomodado, pero él luego ha encontrado la forma de cambiarlo”, explicó tras su tropiezo que le aleja de su vigésimo primer Grand Slam.
“Jugaba con nada que perder, eso es cierto. He intentado diferentes cosas: reducir los peloteos largos, subir a la red, variar el juego…”, agregó en su despedida de Melbourne Park. El de Basileo aseguró que todavía desconoce el alcance de su lesión en el muslo y que lo único que espera es “llegar al cien por cien a Dubai”.
“Lo positivo es que no me siento peor que cuando he empezado el partido, eso es bastante bueno pero ahora hay que esperar a los resultados de las pruebas”, añadió. “Tengo que estar muy feliz del torneo, no he jugado mi mejor tenis pero también lo podría haber hecho peor”, concluyó.