Ramos, cuarto cabeza de serie de este torneo ATP 250, sacó a relucir su mayor experiencia pero también una solidez en el saque que le permitió frenar las acometidas de un Bagnis que había ganado sin gran dificultad sus dos partidos previos.
El catalán, que ya se adjudicó el torneo de Córdoba, se ha quedado como el principal favorito a apuntarse su segundo título del año en tierra batida después de que en los pasados días hayan caído los otros cabezas de serie: el número uno chileno, Cristian Garín y el también argentino Federico Delbonis.
Ramos se enfrentará en semifinales con el argentino Sebastián Báez, 78 del mundo, que derrotó hoy al brasileño Thiago Monteiro, el verdugo de Delbonis.
