17 de diciembre de 2006 - 09:12
Una leyenda inolvidable y recordman mundial inalcanzable
Este artículo tiene 18 años de antigüedad Un día 13 de diciembre de 1956 se lanzaba al agua en el puerto de Concepción Luis Gilberto Ruiz, esperando realizar la más grande hazaña en su historial deportivo, batir el récord de permanencia en el agua. Todo el pueblo paraguayo estaba atento a lo que pudiera realizar este gran deportista. Un hombre que empezó jugando al fútbol en el club Cerro Porteño, en el puesto más difícil: arquero, pero una lesión en la rodilla hizo que no pudiera continuar atajando (lo hizo en inferiores). Luego practicó básquetbol en El Mbiguá, así como natación y remo. Atletismo en el Guaraní y el Alumni. Este delfín del agua nadó desde el año 1951 al 56, el año en que cumpliría su mayor proeza nadando.