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SAN ANTONIO (Higinio R. Ruiz Díaz, corresponsal). Mauro tiene manos mágicas para la pintura, según los entendidos en este arte, y dicen que su mayor especialidad es el retrato. Trasladar la figura de una persona al papel le lleva entre 15 y 20 minutos. Un colegio le pidió retratar a 35 alumnos que están terminando el año lectivo.
“Utilizo todas las técnicas del arte, mi especialidad es el retrato, pero hago pintura, caricatura, diseño gráfico y trabajo en mi casa porque no tengo un lugar en donde puede tener más espacio y comodidad”, expresó el artista. Dijo que su madre le enseñó algunas técnicas que ella aprendió en el Instituto de Bellas Artes, y que luego siguió desarrollando su talento en la escuela y colegio, aunque solo llegó hasta el quinto curso (segundo de la media).
Recordó que a los dos años le afectó la poliomielitis y le dejó en silla de ruedas, y que por ese motivo no pudo perfeccionarse en una institución, pero recurrió a libros e internet para seguir nutriendo su talento y hoy día los resultados son extraordinarios y muy valorados en la zona.
Desde hace 5 años la Municipalidad de San Antonio le contrata para dar clases de dibujo y pintura y además la cooperativa Ñemby suele pedirle sus servicios.
Recordó que pasó momentos muy difíciles con la familia por la falta de trabajo. Comentó que los materiales son muy caros, por ejemplo, un cuaderno para dibujo de apenas 25 hojas cuesta 50.000 guaraníes, una caja de lápices pastel de 12 unidades cuestan G. 100.000 y solo le sirven como para 35 retratos, explicó.
Para las fiestas patronales se instala en la plaza central y realiza retratos a la gente y así asegura unos billetes para el pan de cada día.
Un retrato cuenta G. 30.000, pintura al óleo G. 300.000 y otras pinturas las realiza por desde 70.000 guaraníes.
Mauro está casado con Gladys Centurión y tienen tres hijos: Mario Nicolás, Martín y Clarise. Vive en el barrio Pueblo, Río Salado y Ypané. Para pedidos se puede llamar al 0982-220282.