Trasladar el torneo de Nueva York, a Indian Wells o incluso a Orlando, son serias posibilidades igualmente, pero los directivos siguen trabajando al respecto. Así lo ha manifestado Stacey Allaster, directora ejecutiva del tenis profesional en la Federación de Tenis de Estados Unidos (USTA), a la Associated Press.
“Es nuestra responsabilidad estudiar la posibilidad de una fecha y lugar alternativos, pero esa no es la prioridad”, dijo.
El anuncio final será en junio. Mientras, la USTA trabaja en medidas concretas que pueden definirse en cuatro apartados: vuelos charter, recogepelotas adultos, controles de temperatura y sin público en las gradas. Hay “cada vez menos posibilidades” de que espectadores asistan este año, dijo el director financiero de la USTA, Lew Sherr. EFE
