“Jugar en el Barça es increíble y estar convocado para la selección de mi país es un sueño hecho realidad”, significó el atacante, quien se autodefinió como “un delantero ñarõ”, es decir, bravo.
Godoy se inició en una escuela de fútbol en Concepción. A los 12 años vino al Atlético Tembetary, donde realizó pruebas de la mano de Epifanio Rojas y estuvo seis meses.
“Estando allí un empresario español me vio jugar y me llevó a Espanyol a prueba por una semana y quedé por cuatro años”, significó el chico, quien por diferencias con ese club debió abandonar y pasar nada menos que al Barcelona, “donde estoy hace dos años y me va muy bien, aprovecho al máximo todo lo que puedo aprender. Estoy en la fase final de mi contrato, vence el 30 de junio, y estamos estudiando la posibilidad de renovación”, señaló.
“Con respecto a la Albirroja, todavía no lo puedo creer. Mi sueño era jugar para mi país; empezamos ahora con la Sub 20 y ojalá pueda llegar a la mayor. Lo que pediría es que se tenga en cuenta a los jugadores jóvenes, que se aproveche a los locales. Hay jugadores muy buenos que nos pueden llevar muy lejos”, agregó sonriente.
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