De febrero a mayo últimos, apenas se instalaron algunos puntales nuevos que fueron colocados por la firma adjudicada para la recuperación del sitio debido al grave deterioro, según el arquitecto José Calvo, encargado de la obra. En la fecha se observa sobre el viejo edificio la construcción de una estructura metálica con techo de chapa que sirve de protección a la vieja construcción. “Este tinglado lo volveremos a sacar. Nos vimos obligados a levantarlo porque la estructura es muy vieja y en días de lluvias no puede permanecer mojada. El edificio ya no tiene un buen soporte desde el suelo. No podemos tocar más allá de lo que corresponda porque dañaríamos el patrimonio. Con el avance de los trabajos nos dimos cuenta de que se hicieron varias modificaciones y trataremos de restaurar según el diseño original”, dijo.
Calvo agregó que los principales horcones de madera que sostienen todo el edificio están muy dañados debido a la humedad, hongos y termitas. Indicó que el 60% del resto de las maderas podrán ser rescatadas. Añadió que las paredes de adobe que no presentan mayor daño serán tratadas.
En cuanto a los ladrillos modernos en forma de adobe hechos por los estudiantes de arquitectura de la Universidad Nacional de Asunción y la comunidad civil, dijo que serán utilizados “como un legado de la comunidad para que se sientan parte de la restauración”.
Según la página web de Contrataciones Públicas, en enero último se les pagó G. 441.853.000 y en mayo, G. 191 millones.
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