OBLIGADO, Itapúa (Juan Augusto Roa). Las obras civiles de la planta secadora de yerba mate estarán concluidas en el mes de abril venidero, informó el Ing. Javier Rodríguez, de la empresa constructora EK Construcciones, encargada de la ejecución.
El complejo ocupa unos 4.200 metros cuadrados cubiertos. Tendrá un sector de recepción de la materia prima, inspección de calidad, “sapecado” y secado. El nuevo secadero tendrá una capacidad de procesamiento de entre 140.000 y 150.000 kilos de hoja verde por día.
Según los datos, emplearán astillas de leña o chip, que permiten un proceso uniforme y más preciso. El secadero ubicado en María Auxiliadora, distrito de Tomás Romero Pereira, emplea el mismo sistema para el fuego, el cual es además más económico porque emplea menor cantidad de madera.
El sapecado es el primer paso dentro de la cadena de industrialización de la yerba mate, y más importante, pues de un correcto procesamiento de la hoja en esta etapa dependerá en gran medida el sabor final de la yerba, según explicaron. Se trata del primer contacto de la hoja verde con el fuego.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Con esta nueva instalación, la cooperativa estará en condiciones de procesar el 80% de la yerba mate que industrializa. Parte de la yerba que pone en el mercado viene de secaderos de sus propios socios.
La yerba mate se convirtió en un rubro estrella de la cooperativa, y con su marca Colón ocupa una importante porción de la “torta” de distribución del mercado consumidor. No existen datos muy precisos sobre cuánto es la yerba que se consume en el mercado nacional. Según algunos cálculos, serían unos 60 millones de kilos por año, de los cuales Colonias Unidas aporta unos 10 millones de kilos; cantidad considerable, atendiendo a que existen grandes e importantes empresas yerbateras en el país, refirió el Ing. Aldo Rodríguez, jefe de producción del área yerba mate.
Para tener una idea de la importancia que tiene la yerba mate en el esquema industrial de la cooperativa, basta mencionar que todos los días se empaquetan 28.000 kilos de yerba; la mayor parte se consume en el mercado interno y una pequeña cantidad va a ocho países, entre ellos Bolivia.