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El saldo de la deuda externa asciende a US$ 4.663,4 millones al cierre de julio, lo que equivale a 17,1% del producto interno bruto (PIB).
De acuerdo a estadísticas oficiales, creció 112,3% desde finales de 2004 a julio de 2016, lo que representa US$ 2.467,5 millones más de deuda en ese lapso de doce años. Sin embargo, el mayor aumento, de 74,3%, se ha dado entre el 2013 y lo que va del 2016, que corresponde al periodo de este Gobierno, que ha recurrido reiteradamente a la emisión de bonos soberanos.
En 2013 se emiten por primera vez los bonos soberanos durante el gobierno de Federico Franco (PLRA), por US$ 500 millones, y se abren las puertas del mercado internacional. Ese mismo año, en agosto, asume la administración el presidente Horacio Cartes (ANR) y desde 2014 comienza también a incrementar el endeudamiento externo, principalmente por la emisión de bonos en el exterior, totalizando US$ 1.880 millones en tres años.
En total, la deuda en bonos asciende hoy a US$ 2.380 millones y, a pesar de las críticas y advertencias de parte de analistas económicos, de frenar el nivel de endeudamiento y agendar una reforma para retomar el equilibrio fiscal, Hacienda prepara para el año venidero otra colocación por valor de US$ 600 millones.
Más de la mitad de los fondos obtenidos a través de la comercialización de bonos en los últimos tiempos se destinan a pagar los vencimientos de deuda y a pagar aportes a organismos financieros internacionales.
Esto obedece a que la recaudación impositiva no alcanza para cubrir las inversiones, porque más del 70% de lo recaudado va a financiar salarios de los funcionarios.
Los otros componentes de la deuda externa son: organismos financieros multilaterales o bilaterales (BID, Banco Mundial, Fonplata, CAF, entre otros) por US$ 2.206 millones; y los denominados bonos “chinos”, cuyo saldo es de US$ 77,4 millones, que será cancelado en 2019.
Estos bonos “chinos” fueron vendidos al Chinatrust Bank, mediante una negociación realizada con el gobierno de Taiwán, en 1999 durante el gobierno de Luis González Macchi.
A la deuda externa se suma la deuda interna, en este caso de US$ 1.450.9 millones, contraída vía bonos colocados a través del BCP o la Bolsa de Valores, que incluye bonos para capitalizar el BCP y el Fondo de Garantía de Depósitos.
Con esto, el saldo de la deuda pública total del país, incluyendo administración central y entes descentralizados, sube a US$ 6.114,2 millones y para el año que viene alcanzará US$ 6.700 millones.
Para el ministro es baja y prudente
El ministro de Hacienda, Santiago Peña, insistió una y otra vez que el manejo de la deuda pública de Paraguay es extremadamente prudente y baja, por lo que no ve riesgos en que aumente para poder financiar obras de infraestructura que precisa el país para su desarrollo. En ese sentido, argumentó que la deuda es controlable a pesar de que la presión tributaria es baja, de acuerdo a las proyecciones que realizaron hasta el año 2023.