La titular de la cartera fiscal reiteró ayer ante la prensa que no está de acuerdo con la aplicación de un impuesto a la exportación de soja, como se plantea en la Cámara de Senadores, teniendo en cuenta que restará competitividad al país.
“Nosotros sí consideramos que el sector agrícola puede aportar más al Estado a través de algún tipo de impuesto o algún tipo de propuesta, simplemente ese impuesto a la exportación va a ser muy dañino”, señaló la ministra, tras participar de un seminario realizado en la sala bicameral del Congreso sobre los estándares internacionales de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE).
A su criterio se debe apuntar a impuestos que generen mayor equidad y, en ese sentido, dijo que se podría mirar el impuesto al valor agregado (IVA) de tal modo a elevar la tasa de 5% a 10%, así como también eliminar algunas deducciones impositivas.
Los productos agrícolas en estado natural actualmente pagan un 5% de IVA y equiparar al 10%, que es la tasa general, es un proyecto del cual se habla desde los inicios de este gobierno (también pagan 5% medicamentos y productos de la canasta familiar). Sin embargo, se trata de un impuesto indirecto que lo paga el consumidor final de los productos y servicios gravados por este tributo.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
El impuesto a la exportación de soja con una tasa del 15% es un proyecto de ley impulsado por el Frente Guasu, pero que había quedado de lado. Ahora, todo apunta a que sería aprobado el jueves luego del acuerdo logrado entre el Frente Guasu (FG), el Ejecutivo y los liberales llanistas para el cambio de la mesa directiva en ambas cámaras del Congreso.
En la Cámara de Diputados, mediante ese acuerdo y con un procedimiento considerado inconstitucional, fue nombrado presidente el colorado oficialista Pedro Alliana (titular de la ANR), y luego, en el Senado, mediante una sesión calificada de “mau”, se designó a Fernando Lugo (FG) como el nuevo titular.