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Del total de viviendas y departamentos licitados por Senavitat durante el periodo 2013-2016, en casi el 25% se utilizaron materiales prefabricados, según se puede constatar en los registros de Contrataciones Públicas, se quejó el líder de los industriales cerámicos, Ricardo Maluff.
Con relación específicamente a los departamentos adjudicados y en proceso de oferta o evaluación por parte de Senavitat entre los años 2013 y 2016, el 100% es para construcciones mixtas, es decir, con piso importado y techo de chapa o prefabricado, acorde con los informes de Contrataciones Públicas, indicó el dirigente gremial.
Como consecuencia de las políticas públicas implementadas por Senavitat, de las 11.000 viviendas y departamentos licitados y no declarados desiertos en el periodo señalado, unas 2.551 fueron con materiales prefabricados, indica también el estudio presentado por el gremio CPIC.
“Como los materiales prefabricados emplean 185 trabajadores menos en forma directa en la fabricación y construcción por cada 1.000 viviendas, esta cantidad de viviendas, estimativamente, dejó sin empleo a alrededor de 472 trabajadores durante todo un año”, aseveró Maluff, con base en el análisis impulsado por la citada cámara industrial.
El empresario comentó que las argumentaciones esgrimidas por Senavitat para optar por los materiales importados, excluyendo a los productos cerámicos nacionales, apuntan a la aplicación de “técnicas de construcción más rápidas”. Sin embargo, del “apuro para la Navidad del 2016, Senavitat pasó más de ocho meses para entregar los primeros departamentos en uno de los casos”, mencionó.
“Senavitat viola la Ley 4558/11, que establece la preferencia del 20% a los materiales nacionales y los criterios de 40% a más de composición nacional, y como consecuencia también uno de los artículos de la Ley del Presupuesto General de la Nación”, refirió. Agregó que dicha institución estatal pisotea la Constitución y las leyes al licitar obras con materiales prefabricados, pisos cerámicos esmaltados y chapas que no cumplen el 40% de composición nacional y deja de lado los materiales locales.