Otro efecto apuntado es el aumento del crédito a través de entidades paralelas al sistema financiero, porque las personas de menores ingresos están más sujetas a entrar en ese esquema.
Podría también facilitar el traspaso de los usuarios a instrumentos con tasas superiores. Ejemplo: pasar a créditos de consumo (agosto la tasa promedio ponderada fue del 31 % (bancos) y 36,2 % (financieras). Otro impacto negativo de la resistida ley sería una menor cantidad de acuerdos con el sector comercio para financiación, generando un impacto negativo sobre el consumo.