Según informes oficiales de la Policía Federal del Brasil, diariamente es decomisada una gran cantidad de productos contrabandeados desde el lado paraguayo, especialmente cigarrillos. Las mercancías salen de los puertos clandestinos ubicados en la ribera paraguaya de manera totalmente liberada, a pesar de que está bajo la responsabilidad de la sub Área Naval de Canindeyú.
También por la frontera seca, que está a cargo de la Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, cruzan grandes camiones repletos de cigarrillos que en el lado paraguayo se pasan por alto.
En el lado brasileño, solo en las últimas semanas, y a pesar de la reciente intervención de la Unidad de Lucha contra el Contrabando, encabezado por el ministro Emilio Fúster, fueron incautados cigarrillos, camiones y embarcaciones por aproximadamente 10 millones de reales, unos G. 15.000 millones.
Las unidades de combate en la frontera, integradas por la Policía Federal, la Policía Rodoviaria Federal, el Batallón de Policía de Frontera (BPFron), Núcleo Especial de la Policía Marítima (Nepon) y el Ejército brasileño combaten de día y de noche el contrabando que sale de la margen paraguaya.
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Así como existe toda una estructura logística en el lado paraguayo, en el otro lado del río centenares de personas se dedican a recibir en sus puertos clandestinos las cargas que salen de Paraguay y siguen rumbo a los mercados más importantes del Brasil.
Según un reciente estudio, 57% del consumo de cigarrillos en Brasil corresponde a marcas paraguayas ingresadas íntegramente de contrabando.
Por eso, los brasileños no solo combaten el contrabando en el río. Muchas cargas de cigarrillos, drogas y armas son decomisadas ya en las rutas nacionales.
En ocasiones, como el jueves 20 de febrero, un equipo de represión de la Receita Federal decomisó dos camiones con un millón de brezas de cigarrillos, recientemente ingresado al Brasil. Representó una pérdida de G. 1.500 millones a los contrabandistas. Dos días antes, el 18 de febrero, cayeron dos camiones bitrenes con una carga evaluada en 5.200.000 reales, unos G. 7.800 millones.
En principio se creía que tras la intervención de la Unidad Anticontrabando en depósitos y puertos clandestinos ubicados en la zona de Camino 3, Guadalupe, los contrabandistas se iban a replegar al menos por un tiempo. Las intervenciones se realizaron el 5 de febrero con el resultado de 40 millones de cajetillas de cigarrillos incautados, 15 camiones e igual cantidad de lanchas.
También se esperaba que la Marina paraguaya, responsable de la custodia de la ribera del Paraná, ya no permitiría el contrabando. Sin embargo, los controles del Área Naval Canindeyú se limitan a habitantes de Salto del Guairá que ingresan al río para paseo o pesca. Los contrabandistas no sufren ningún tipo de control ni registro.