CAACUPÉ (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional). La actividad central por la conmemoración del 250° aniversario de esta capital del departamento de Cordillera comenzó a las 11:00 en el Mirador de la Basílica, que fue transmitida a través de las redes sociales. Asistió un reducido grupo de personas, entre el intendente de Caacupé, Diego Riveros (PLRA); el obispo de Caacupé, monseñor Ricardo Valenzuela; y funcionarios municipales.
En un mensaje a la ciudadanía, que comenzó con felicitaciones por el importante acontecimiento, el obispo mencionó que nadie se hubiese imaginado que los festejos por los 250 años de la ciudad se realizarían de manera virtual, el aislamiento, por la pandemia del coronavirus.
Pidió a toda la ciudadanía que se unirse en oración para pedirle a Dios misericordia y fuerza en el difícil momento que vive la ciudad, nuestro país y el mundo entero. Invitó a reflexionar sobre el valor de la vida, de la familia y el tener la oportunidad de abrazar a nuestros seres queridos.
También exhortó a pedir fortaleza para el personal de blanco y agentes de seguridad que están en el frente de la batalla. Manifestó su deseo de que pronto se supere “esta etapa de enseñanza y estemos fortalecidos en la fe en la Virgen de los Milagros de Caacupé”.
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“Cuando les pedimos que se queden en sus casas, es porque no queremos que falte ninguno de los 60.000 habitantes de esta ciudad a causa del coronavirus”, expresó.
Mons. Valenzuela felicitó al pueblo caacupeño e instó a seguir pidiendo la protección de la Virgen y a respetar las indicaciones sanitarias de las autoridades.
“Es muy triste tener que enterarnos de que ya se compraron tres mil bolsas mortuorias, esperando lo peor” mencionó, y añadió que, más que nunca, todos deben quedarse en sus casas para protegerse y proteger a sus semejantes.
Luego se realizó una ceremonia de bendición con la imagen de la Virgen de los Milagros en los cuatro puntos cardinales de la ciudad desde el mirador, implorando su protección. Finalmente, hubo rezo del Ángelus. El acto culminó con la entonación del Himno a la Virgen de Caacupé y el Himno a Caacupé.