FUERTE OLIMPO, Dpto. de Alto Paraguay (Carlos Almirón, corresponsal). Los incendios forestales registrados a mediados del año 2019 destruyeron unas 350.000 hectáreas de reservas del Alto Paraguay. El área más afectada corresponde a bosques vírgenes, cuya rica fauna sufrió las consecuencias.
Numerosos animales, como los yaguaretés, tuvieron que desplazarse en busca de nuevos territorios.
Si bien es casi normal que los grandes felinos aparezcan de manera casual en los establecimientos ganaderos en busca de alimentos, como el ganado, en los últimos días el número aumentó de manera considerable debido a la sequía que azota la zona, según expresaron los peones.
Afirmaron que los felinos llegan en busca de agua de los tajamares porque los riachos están prácticamente secos. El desplazamiento hace que los ejemplares de estos animales en peligro de extinción sean cazados por representar riesgo para el ganado.
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Dueños de algunos establecimientos incluso ofrecen incentivos de un millón de guaraníes para quienes maten a los yaguareté, según denuncias.
Sabine Vinke, de la organización Paraguay Salvaje, expresó que los yaguaretés no atacan si no se sienten amenazados. Indicó que la recomendación principal para los dueños de estancias en caso de que divisen algún ejemplar de estos felinos es mantener la tranquilidad del ganado para que no exista reacción del animal. Ellos (yaguaretés) no atacan cuando la manada está tranquila y toda junta, explicó.
Señaló que los yaguaretés actualmente están saliendo de su hábitat en busca de agua, debido a la sequía. Muchas llegan para tomar solo agua y luego se retiran nuevamente hacia sus hábitat, comentó.
Vinke también aconsejó que los dueños de los establecimientos no tengan cerca de zonas boscosas a sus animales vacunos, como tampoco los reservorios de agua. En este punto aclaró que a los yaguaretés no les gusta transitar por lugares abiertos o descampados.
Sin plan de acción
La directora de Vida Silvestre del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades), Nora Neris, señaló que en forma inmediata no está previsto implementar en el Chaco un plan de protección de animales en vía de extinción, como el yaguareté. Afirmó que recién luego de la puesta en funcionamiento de una sede en la zona podrán trabajar con los ganaderos en el cuidado de la vida silvestre.
Añadió que existen trámites avanzados con la Gobernación de Boquerón para la habilitación de una oficina en Filadelfia.