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Agro Nikas SA es una empresa fantasma.
La Abogacía del Tesoro confirmó que no tiene registros de antecedentes, movimiento o asambleas en la sociedad anónima.
Salvo la inscripción en el Ministerio de Hacienda, no se tiene ninguna otra información de la firma.
Agro Nikas SA no existe.
La empresa, sin embargo, es utilizada para tomar posesión de un inmueble en Mayor Otaño que tiene legítimo propietario.
Los Eisen, a pesar de la validez del título de propiedad que ostentan, fueron desalojados de su finca y en su reemplazo se encuentra Agro Nikas SA.
De nada sirve la orden de no innovar que rige sobre la finca de 1.742 hectáreas; los fiscales de Mayor Otaño, María Auxiliadora y Encarnación hacen caso omiso al mandato judicial.
El juez de Paz de Mayor Otaño, Abog. Crispín Zorrilla, confirmó en dos oportunidades la violación de la orden de no innovar.
Se urgió sin éxito al Ministerio Público intervenir para dar cumplimiento al mandato. No se tuvo en cuenta el pedido del juez de la causa.
¿Qué puede hacer la familia Eisen en estas condiciones?
¿A quién se tiene que recurrir en espera de justicia?
Y lo que es peor: ¿de qué sirve un título de propiedad en Paraguay?
Preparativo para cultivar
En Mayor Otaño es un secreto a voces que Nivaldo Ouriques Kestring se está preparando para cultivar por segundo año en la propiedad de los Eisen.
Sin pagar un centavo por el uso de tierra ajena, Nivaldo Ouriques Kestring buscaría contar de nuevo con el apoyo de fiscales, tal como sucedió el año pasado.
No paga arrendamiento, entonces podría disponer de dinero para financiar el respaldo de agentes del Ministerio Público.
El caso Eisen es emblemático: los usurpadores reconocen que el título de propiedad de la familia es legítimo, pero no devuelven la tierra. Los Eisen fueron abandonados por la justicia.
roque@abc.com.py