PARÍS (EFE). Los tres países exhortaron a la República islamista de Irán, en un comunicado conjunto, a no incumplir los acuerdos antinucleares de 2015. A su vez, denunciaron el papel de desestabilizador en la región y el programa balístico de Teherán.
Tras recordar que los tres países han lamentado que EE.UU. se saliera de forma unilateral del pacto con Irán y reanudara las sanciones contra Teherán, las potencias denuncian la violación del mismo por parte de los iraníes. “Es esencial que Irán vuelva al pleno respeto de sus obligaciones contenidas en el acuerdo. Hemos mostrado nuestra profunda preocupación frente a las acciones emprendidas por Irán en violación de sus compromisos desde julio de 2019”, indican París, Berlín y Londres, que instan a cesar esas violaciones, en referencia al enriquecimiento de uranio.
Caso contrario, avisan, se reservan la posibilidad de aplicar las cláusulas contenidas en el acuerdo, sin especificar cuáles.
Francia, Alemania y Reino Unido consideran necesario “definir un marco a largo plazo para el programa nuclear iraní”.
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Los tres firmantes denuncian el “papel desestabilizador” que ha desempeñado Teherán los últimos meses en la región, sobre todo mediante los Guardianes de la Revolución Islámica y la fuerza Al Quds, milicia destinada a las operaciones de Teherán en el extranjero.
Vigilia y detención
Un gran despliegue de antidisturbios trató de impedir ayer en Teherán amplias protestas contra el sistema islámico a raíz del derribo “por error” de un avión en el que viajaban 176, pero los ciudadanos lograron realizar varias concentraciones de rechazo.
Aunque las protestas no son de gran envergadura debido al miedo a la represión.
Los iraníes están consternados desde que las FF.AA. reconocieran que dispararon un misil “por error” contra una aeronave ucraniana matando a todos sus ocupantes, en su mayoría compatriotas.
Esta rabia convirtió la vigilia de la víspera en la Universidad Amir Kabir en una protesta antigubernamental en la que se gritaron fuertes lemas como “la renuncia (de los responsables) no es suficiente, un juicio es necesario” y “Muerte al dictador”, en referencia al líder supremo, Alí Jameneí.
Esa concentración fue dispersada por la policía, que también detuvo al embajador británico en Teherán, Rob Macaire, quien fue convocado por el Ministerio de Exteriores por su asistencia a una protesta “ilegal”.
“Confirmo que no participé en ninguna manifestación. Fui a un evento anunciado como una vigilia por las víctimas de la tragedia #PS752 (...) Me fui después de 5 minutos, cuando algunos comenzaron a corear (lemas)”, precisó en Twitter el diplomático.