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CIUDAD DEL ESTE (De nuestra redacción regional). Las fuentes anticiparon que el “Operativo Ágata” quedará apenas como un “entrenamiento” en comparación al control militar que pretenden instalar en la frontera desde el próximo año. Esto según una publicación del diario paranaense “A Gazeta do Iguaçu”.
El gobernador del estado de Paraná, Beto Richa, hizo el pedido el viernes último al Ministerio de Defensa del vecino país. Nota mediante, solicita que la segunda etapa del Sistema Integrado de Monitoreamiento de Fronteras (Sisfron) sea implementada inicialmente en dicho estado, en regiones limítrofes con el Paraguay y Argentina, según publica el diario brasileño de Foz.
Entre los argumentos que expone Richa, menciona la infraestructura del estado y las unidades con que cuenta el Ejército en dicha zona. Además los aeropuertos estatales que pueden recibir aeronaves comandadas, es decir, aviones no tripulados, para controles desde el inicio de la frontera con Paraguay (Guaíra) hasta Argentina (Barracão).
El Sisfron está encabezado por el Ejército, acompañado de la Marina y la Aeronáutica de Brasil, que pretende ser implementado por etapas y cubrir los 16.886 kilómetros de frontera. En diez años, el dinero invertido en la ejecución del programa será nada menos que de unos 11,9 billones de reales.
El objetivo es hacer frente a las actividades ilegales en la frontera, como el tráfico de armas, droga y trata de personas. Con la presencia del Ejército pretenden contar con más infraestructura para el combate contra la asociación criminal, fundamenta el gobernador.
La inversión en infraestructura tecnológica será de 5,9 billones de reales, 3 billones en obras civiles y 3 billones para infraestructura de apoyo para la actuación operacional en las fronteras terrestres.
“Apenas entrenamiento”
El “Operativo Ágata”, que consistió en intensos controles en la frontera entre Brasil y Paraguay, que se inició en mayo de este año, quedará apenas como un “entrenamiento” en comparación con el control militar que proyectan ejecutar.
El gobernador se comprometió, en el escrito, en brindar todas las facilidades a las Fuerzas Armadas para que se empiecen a ejecutar las acciones ya en 2014.
Un gran resentimiento han causado en el comercio de Ciudad del Este los estrictos controles en el vecino país.
Las principales actividades ilegales de la frontera, según Richa, son el tráfico de drogas, armas, explosivos y municiones, reducción de vehículos robados e inmigración ilegal de personas.
El Sisfron pretende implementar un estricto monitoreo en los más de 16.000 kilómetros de frontera terrestre que tiene Brasil.