Despeje deja ver destrozos en la plaza Independencia

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Maderas y chapas se acumulan en la plaza Independencia durante el despeje del espacio verde, ocupado hace varios meses por vecinos de la Chacarita. Estos no ayudaron en la mudanza.
Maderas y chapas se acumulan en la plaza Independencia durante el despeje del espacio verde, ocupado hace varios meses por vecinos de la Chacarita. Estos no ayudaron en la mudanza.Archivo, ABC Color

La plaza Independencia, declarada Patrimonio Histórico, está en estado desastroso. Se nota con el avance del despeje que hace la Comuna asuncena del espacio, llevando a los damnificados y sus pertenencias a la Chacarita. En ningún momento los ocupantes ayudaron con el traslado de sus enseres.

De a poco se va liberando la plaza Independencia, ocupada hace varios meses por vecinos de la Chacarita que en su momento fueron afectados por la crecida del río Paraguay. El sitio quedó en estado ruinoso y sus monumentos afectados.

Para el proceso de mudanza se requirieron más de 20 obreros municipales que trabajaron desde tempranas horas. Llamó la atención la actitud de los ocupantes, que en ningún momento se dignaron a brindar ayuda a los funcionarios para alzar las camas y roperos en los vehículos. En cambio, se pasaron tomando tereré mientras los obreros alzaban las pertenencias.

El empastado de la plaza desapareció por completo y se realizaron intervenciones con materiales en zonas del caminero que, según la Comuna, se hicieron sin autorización. Los monumentos y esculturas, también protegidos bajo la figura de patrimonio nacional histórico, están dañados en su mayoría.

Los bancos de madera y los camineros quedaron arruinados, así como varios sectores presentan pozos por donde pasan improvisados caños de la Essap.

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El lugar también presenta acumulación de tierra en algunos sectores y barro, producido por las fugas de agua.

Los funcionarios municipales señalaron que están haciendo un inventario de cómo está la plaza. Comentaron además que hasta tuvieron que desarmar un gallinero que fue instalado en medio de la plaza.

Varios pisos cerámicos están ya arruinados, empeorando el aspecto de la plaza, ubicada entre la Catedral y el Viejo Cabildo. Una eventual reparación del sitio costaría más de 500 millones, según las primeras estimaciones del Municipio.