Luego recordó: “Antes veníamos caminando desde Guarambaré, 50 kilómetros, cuando éramos más jóvenes, ahora ya (la edad) nos pasa la factura”, dijo entre risas. De igual forma, ahora ya vienen acompañados de su hijo, entonces toman un colectivo y se bajan en la ciudad de Ypacaraí, desde donde caminan.
Dijo que solicitaron permiso en sus respectivos trabajos. “Estamos pasando un lindo día porque el tiempo ha ayudado mucho ya que está fresco”, dijo. No participarían de ninguna misa ya que deben volver para la tarde y así asistir en horario nocturno a la oficina.
