“Las áreas residenciales han sido atropelladas con la construcción de edificios en altura y la explosión de comercios y servicios en total contravención a lo que disponen las ordenanzas que rigen la materia, violentando de esta manera nuestros derechos y propiciando el caos que conlleva el funcionamiento de muchos de ellos”, dice parte de la denuncia presentada por ciudadanos asuncenos al Defensor del Pueblo, Miguel Ángel Godoy Servín, quien los recibió en audiencia.
Liza Velázquez, vecina, explicó que la lucha viene desde hace años y el problema afecta a varios barrios, como Las Mercedes, Recoleta, Mcal. Estigarribia, Trinidad, entre otros.
Dijo que un ejemplo de las construcciones de edificios en altura en áreas catalogadas como residenciales se encuentra en el Barrio San Jorge. En este se ha aprobado la construcción de un edificio de once pisos, sobrepasando lo permitido en dicha zona, alegan.
Asimismo, agregaron que lo que agrava la situación es que la Intendencia realiza la expedición de las licencias comerciales, en su mayoría, de manera provisoria, para el inmediato funcionamiento de locales comerciales en áreas en las que no están permitidos estos negocios. Estos incluso vencen, pero los locales continúan funcionando sin ningún control, aseguraron.
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La Municipalidad de Asunción ha recibido y escuchado en varias ocasiones a los vecinos. Ha declarado que estudiará los casos. Algunos de ellos los resolvió. Por ejemplo, con el cierre de los food parks, y de algunos pubs; pero en los casos de edificios ha defendido a las empresas constructoras.
Suspender lo innecesario
Tras publicaciones de nuestro diario sobre el derroche de dinero en compra de sillas y electrodomésticos en la Municipalidad de Asunción, el concejal Orlando Fiorotto (ANR) dijo estar a favor de reducir gastos en la Comuna. “Estamos obligados a mejorar los gastos públicos cuando se trata de dinero del contribuyente. Gastos innecesarios deben suspenderse y volver a ganar la credibilidad ciudadana y, de ese modo, motivar al contribuyente a cumplir con sus obligaciones tributarias”, expresó.
Agregó que “poco favor le hacemos a la administración municipal cuando se gasta en cuestiones que no benefician a la ciudad”. En total, G. 128 millones serán destinados a compra de sillas y otros.