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A 7,1 metros bajó el nivel del río Paraguay en Asunción. Son 87 centímetros menos de la máxima altura a la que llegaron las aguas, por lo que ya se pueden observar cuadras que están liberadas para el tránsito y viviendas que están libres de agua en el patio.
Un equipo de ABC Color recorrió parte del Bañado Sur de Asunción y se encontró con el cauce de arroyo Mburicá repleto de desperdicios. Esta vez, el problema principal era la cloaca –en Salvador Prats Gill y Juan León Mallorquín– desde la cual brotaba un nauseabundo y espeso líquido.
Nuestra permanencia en el lugar despertó la sorpresa de los vecinos, quienes se acercaron al equipo a denunciar que el agua servida brota desde hace tiempo y que va a parar al cauce del Mburicá, el cual de hecho ya está repleto de desperdicios.
Niños que transitaban por el lugar optaron por cubrirse la nariz para continuar su trayecto mientras que los adultos, con una resistencia mayor quizás por soportar durante años este problema, circulaban sin inmutarse.
Los damnificados que iban retornando a sus viviendas, consultados por ABC Color, alegaban ser conscientes de que el río podría volver a subir, pero que la necesidad de volver apremia por la alta cantidad de robos que se producen en las zonas ya secas.
En la jornada de ayer, fueron aproximadamente 20 las familias que volvieron desde los refugios, según dijo el titular de Emergencias y Desastres de la Municipalidad de Asunción, Víctor Hugo Julio.
Indicó que la Comuna no brinda ningún tipo de asistencia a los damnificados para movilizarse de vuelta ya que el Estado pretende que las familias permanezcan en los refugios, atendiendo a las nuevas crecidas que podrían registrarse en marzo.
Son unas 140 las familias que volvieron a sus casas, desoyendo las recomendaciones de quedarse.