En vez de preservarse, área verde del RC4 se convirtió en un desierto

Vecinos de Zeballos Cue habían advertido que la –por entonces posible– construcción de un barrio en el predio militar del RC4 iba a destruir un área de rica vegetación que servía como amortiguamiento al Jardín Botánico y Zoológico de Asunción. Hoy en día, la carpeta verde dio lugar a un desértico arenal donde se asentarán 1.000 viviendas de damnificados.

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De las 57 hectáreas del predio del RC4, 23 serán utilizadas para asentar el futuro barrio San Francisco, según los planos aprobados por la Intendencia de Asunción, cuyo tratamiento está pendiente en la Junta Municipal.

Las 24 hectáreas restantes se mantendrán como parte del área de amortiguamiento del Jardín Botánico y Zoológico de Asunción.

El diario ABC Color realizó varios recorridos por el RC4 y constató cómo la mitad del terreno fue convirtiéndose en un desierto. Según se puede observar en la imagen tomada el 16 de febrero, la carpeta verde formaba parte del paisaje.

Meses después, máquinas pesadas que realizan trabajos de movimiento de suelo convirtieron al espacio de 23 hectáreas en un desierto. El contraste entre ambas imágenes muestra la forma en la que se mutiló uno de los pulmones de la ciudad.

Una vez que la Municipalidad de Asunción reúna la documentación requerida para aprobar el inicio de obras, la otrora carpeta verde dará lugar al barrio San Francisco, donde 1.000 familias de los barrios Chacarita y Zeballos Cue podrán vivir en una casa digna con acceso a los servicios básicos, según las presentaciones virtuales de la Secretaría Nacional de la Vivienda y el Hábitat (Senavitat).

El concejal de Asunción Federico Franco Troche (concertación Juntos Podemos) pidió que las 24 hectáreas restantes sean preservadas y pasen a ser de dominio público municipal. En contrapartida, según la propuesta del edil, la Comuna ofrece a las Fuerzas Armadas regularizar la ocupación de tierras donde hoy en día están asentados el Comando de Ingeniería, el Comando de Comunicaciones y el Hospital Militar.

La permuta será para preservar lo que queda de las 54 hectáreas restantes donde, según el proyecto original de Senavitat, iban a construirse otras 1.000 viviendas.

Para el inicio de obras aún falta el fraccionamiento, con base en las 23 hectáreas y no en las 54 como inicialmente se proyectó. Este proceso debe ser aprobado por la Intendencia, la Junta Municipal y el Servicio Nacional de Catastro.

El barrio San Francisco estaría terminado, según previsiones, en el primer trimestre del año 2017.

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