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LIMA, Dpto. de San Pedro (corresponsal). En las zonas rurales de los distritos del segundo departamento, a la falta de aulas y muebles en las instituciones educativas, se suma la carencia de sanitarios y servicio de agua potable. Tal es el caso de unas ocho escuelitas del asentamiento de Sanguina Cue.
Varias obras encaradas con fondos públicos en los asentamientos de Lima y zona de Yaguareté Forest de Santa Rosa del Aguaray, fueron abandonadas sin concluir los trabajos, por lo que cientos de niños y adolescentes de escasos recursos darán clases bajo árboles.
El director del colegio Mariscal Estigarribia, de Lima, Félix Gauto, dijo que entre la Municipalidad y la Gobernación se tiran la pelota sobre la responsabilidad de aplicar lo establecido para el mejoramiento de las escuelas. “Nos dicen que no pueden invertir dinero de Fonacide porque eran obras ejecutadas por el MEC, y en el ministerio argumentan que no hay dinero”.
La intendenta de Lima, Élida Sosa, aduce que los recursos otorgados son insuficientes y que existe demasiado protocolo para la licitación y adjudicación de obras. El intendente de Santa Rosa del Aguaray se niega a rendir cuentas de los fondos públicos que administra. Recibió de Fonacide más de G. 898 millones.