Copa Sudamericana, circo del continente

La Copa Sudamericana, segundo torneo más importante del año que organiza la Confederación Sudamericana de Fútbol, antes de convertirse en una honorable y justa competencia deportiva entre los mejores clubes de Sudamérica, se volvió un circo continental, cuyos directores principales son Brasil y Argentina, quedando como payasos y mascotas el resto de los países participantes.

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Este año (ya se puso en marcha) se celebra la undécima edición del certamen internacional. Sin siquiera haber jugado, e incluso antes del inicio del torneo, Brasil y Argentina ya tienen asegurados siete cupos en los octavos de final, cuatro y tres plazas, respectivamente. ¡Qué ecuánimes!

En la primera y segunda fase de este torneo se da una carnicería entre los equipos de Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela.

En partidos de ida y vuelta (viaje tras viaje) los cuatro equipos de cada nación hacen malabares y se tiran cuchillos por un lugar en la segunda fase. Con la pantalla de “zona sur o zona norte”, se ubica a los países con mayor cercanía geográfica para evitar los “desgastantes” viajes. Aún no aparecen en escena argentinos ni brasileños. Ellos, tranquilos en camerinos esperando la función principal. El escenario se está montando y los trapecistas divirtiendo al público.

Ya con los emparejamientos definidos, se procede al inicio de la segunda fase. Otra vez, bolivianos, colombianos, chilenos, ecuatorianos, paraguayos, peruanos, uruguayos y venezolanos compiten entre ellos. Se repiten los irritantes periplos, cansadores y costosos. Mientras que brasileños y argentinos, que ya compiten en esta instancia -al fin-, se limitan a jugar entre equipos de su mismo país. Sin necesidad de salir del territorio nacional, preocuparse por los viajes, ni realizar ese desgaste que los otros equipos hicieron por partida doble. Recién se preocuparán por estos detalles en los octavos de final. ¡Majestuosa ventaja deportiva!

¿Por qué Olimpia, campeón del torneo Clausura 2011 paraguayo y equipo que mayor puntos acumuló (88) en la temporada pasada, debe remar mucho más para llegar a octavos de final en la Sudamericana que Tigre de Argentina, que en el Torneo Apertura 2011 (se disputa el Apertura en la segunda mitad del año) del vecino país terminó en séptima posición y solo acumuló 52 puntos en toda la temporada?

¿Por qué Cerro Porteño, vicecampeón del torneo Clausura 2011 paraguayo y equipo que sumó 67 unidades el año pasado entre ambos torneos, tiene que viajar a Chile y Venezuela para tratar de llegar a los octavos de final, instancia a la que Argentinos Juniors, que salió quinto en el apertura pasado de Argentina, tan solo sumó 52 unidades en ambos certámenes y aún no “peregrinó” a otras ciudades del continente, llegaría solo con ganar a otro conjunto de su mismo país?

Conmebol: ¿Por qué los mejores clasificados de cada país no se instalan directamente en la segunda fase, y se deja a los equipos que “entran por la ventana” a ir competir en la jaula con los tigres? ¿Qué mecanismos se pueden utilizar o modificar para que todos los países lleguen con las mismas posibilidades de conquistar la gloria? O de última, creen un torneo donde solo compitan equipos argentinos y brasileños.

Sin lugar a dudas, una injusticia deportiva que resta prestigio a esta competencia que, antes que engalanar la competitividad de la región, lo convierte en el circo del continente.

julio.bonnin@abc.com.py

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