04 de octubre de 2019 - 02:00
Golpe a la prepotencia y la soberbia
Este artículo tiene 6 años de antigüedad La familia Zacarías Irún-McLeod no cumplió la notificación de la Municipalidad de Ciudad del Este de despejar la vereda pública frente a su casa, donde la pareja mandó construir una superequipada caseta para sus guardias. Vencido el plazo, el intendente Miguel Prieto en persona encabezó la demolición y les dejó de regalo una garita de fibra de vidrio con dimensiones reglamentarias.