Además de analizar la posibilidad de eliminar algunos entes o volverlos más austeros, señaló que otros requieren mayor atención del Estado para justificar su existencia, sin entrar a mencionar cuáles son los mismos. “Hay entes con diferentes denominaciones y debemos ver cómo hacerlos bien funcionales en su servicio a la comunidad. Hay institutos, direcciones, secretarías, servicios, consejos, comisiones, entes reguladores, fondos y agencias que precisan una mirada más concentrada de la inversión que hace el Estado en todos ellos”, dijo Velázquez, quien esta semana se reunió a dialogar con empresarios.
Habló también que la reforma estatal contempla la redistribución de funcionarios públicos.
No hablan de depuración
Desde abril que el Vicepresidente lidera el debate sobre la reforma del Estado, y en paralelo, el Congreso a través de la Comisión Bicameral liderada por el diputado Raúl Latorre (ANR-HC). Mientras que el Gobierno ya tiene un borrador de los cambios que planea realizar, en el Congreso siguen organizando un punto de partida.
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El debate gira en torno a reorganizar las instituciones, pero no se aborda con vehemencia su depuración. Los casos de nepotismo, clientelismo, concursos amañados, beneficios alevosos a políticos, seccionaleros, pago de favores, no son abordados por los involucrados.