Cuando estuvo en una unidad ordinaria formó parte de una rosca, que se habría enriquecido a través del procedimiento de alcotest. El destino de las multas que la misma y otros colegas suyos habrían recibido se tiene que investigar.
Los abogados dijeron que sería importante que el fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón, tome medidas ante las graves denuncias y realice un control para saber si la multa para los conductores que manejan ebrios se destinan a instituciones de beneficencia o van a los bolsillos de los representantes de la sociedad.
