17 de abril de 2005 - 09:04
100 años bien vividos
Este artículo tiene 20 años de antigüedad Vivaz, activa y resuelta, Ana María Machaín de Serrati superó la barrera de los cien años con una lucidez admirable. Su rostro irradia reminiscencias de un pasado bien vivido en el seno de una distinguida familia emparentada con el ex presidente Facundo Machaín. "De niña escapaba con mi hermano para jugar con barro en los zanjones de las calles de Asunción", dice. Cuando se casó siguió al marido hasta los obrajes de Puerto Pinasco, donde comía como los arrieros y dormía como los peones. Sintió de cerca la guerra y las revoluciones, pero la protegió la bendición de Pío XII, en Roma.