Domingo de Ramos
Hoy es Domingo de Ramos, día que marca el inicio de la Semana Santa y el final de la Cuaresma. Se conmemora la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén cuando el pueblo lo recibió con ramos de olivo, aclamándolo como el hijo de Dios, mientras cruzaba las calles montado en un burro. Sus seguidores lo recibieron contentos por el camino de la oliva mientras gritaban entusiasmados: “¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!”. Después se producirá la Pasión, Muerte y Resurrección. En la eucaristía que se celebra hoy se reviven dos momentos muy importantes del Domingo de Ramos: la procesión por el camino de la oliva y la palabra de Dios, la Pasión del Señor que se recoge en el Evangelio de San Mateo.
La gente acude en masa a la celebración principal “llevando hojas de palma pindo, primorosamente trabajadas, tejidas o trenzadas, formando dibujos variados y, también, hojas de laurel. A estas palmas y hojas nuestra gente suele agregar un ramito de ruda o de romero”, detalla el doctor Dionisio González Torres en su libro Folklore del Paraguay.
En la actualidad, en su mayoría, los ramos son comercializados en el Mercado 4 y decorados con ramitas de ruda, romero y flores de siempre vive. Finalizada la misa de bendición de las palmas, “se guardan junto a los nichos o mesa de imágenes de santos de la familia. Algunas hojas del pindo karai suelen colocarse detrás de la puerta de entrada de las casas, para protección del hogar contra los maleficios, las desgracias, o contra el Pombéro (ser mitológico) o póra (fantasma), o en las cabeceras de las camas”.
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Agrega que es costumbre quemar unas hojas de pindo karai en caso de enfermedades, de mala racha en la vida de la familia, en días de grandes tormentas o muy mal tiempo, particularmente cuando hay muchos rayos y relámpagos para que pase el mal momento. “Del pindo karai se hace también ‘reliques’ o amuletos, pequeñas figuras trenzadas que se llevan como escapulario”, cuenta. De esta manera, se representa la vida y la Resurrección de Cristo y, además, como protección contra cualquier mal. En las iglesias, estos ramos se conservan por un año para ser quemados y sus cenizas serán utilizadas el Miércoles de Ceniza.
Fuentes: González Torres, Dionisio. Folklore del Paraguay. Asunción. / https://sobrehistoria.com/ / http://proverbia.net