Edith Jiménez para celebrar

La exposición se compone de obras de variadas etapas del grabado de la artista. Incluye xilografías en blanco y negro fechadas a partir de fines de los años 50, hasta serigrafías producidas mucho después, en los 90. También se exponen impresiones de matrices múltiples en color desde los años 70.

“La muestra levanta, así, un pequeño panorama histórico de la producción gráfica de Edith Jiménez, uno de los nombres más importantes del grabado paraguayo. Cada ejemplar de su obra es considerado una pieza original: aunque se base en la impresión múltiple, xilo o serigráfica, los grabados son diseñados, impresos (o controlados en su edición), y firmados por la artista”, explican.

Si bien no es la única expresión que explotó la artista, es el grabado en cualquiera de sus formas –quizá– la insignia que más la caracteriza. Edith Jiménez nació en Asunción en 1918 y falleció –también en la capital del país– en 2004. Estudió pintura con Jaime Bestard –un gran maestro del color– y poco tiempo después ya tuvo la oportunidad de participar en la famosa Bienal de Arte de São Paulo. Con otros grandes del arte paraguayo, formó parte del denominado grupo “Arte Nuevo”, con quienes se instala en el país –un tiempo después que en otras partes del mundo– la modernidad artística.

Con el maestro Livio Abramo estudió grabado, técnica por la que se la reconoce ampliamente hasta hoy. Grandes frutos, superposición de colores y texturas, entre otros elementos puros y vibrantes se muestran fuertes y con un aire de sensualidad propia de la naturaleza y sus sugerentes formas.

La exposición se puede visitar con agendamiento y protocolo sanitario al (0981) 616 287 y el acceso a la muestra se da por Sargento Martínez 271 e/Telmo Aquino y Abente Haedo.

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